Minimizan agresión

El ataque a migrantes en un paraje del municipio de Cosoleacaque, Veracruz, fue considerado por el Gobierno estatal como una riña entre hondureños, lo que provocó las críticas de activistas.

De acuerdo con testigos, un grupo de centroamericanos viajaba la noche del miércoles en la parte superior del tren que cubre la ruta Coatzacoalcos-Tierra Blanca, cuando sujetos armados les exigieron a cada uno una cuota de 100 a 300 dólares para continuar su viaje.

Al no pagar, algunos fueron lanzados al vacío y otros atacados a machetazos.

Las autoridades estatales reportaron 10 lesionados mientras que defensores de los migrantes aseguraron que el número ascendió a 16.

Ese día, el Gobierno estatal afirmó en un boletín que el incidente se trató de un pleito entre migrantes hondureños.

"Los lesionados, de nacionalidad hondureña, declararon ante las autoridades del INM que, a la altura del kilómetro 25, otros migrantes de la misma nacionalidad, que también viajaban a bordo del tren les quisieron cobrar una cuota, lo que generó una pelea", insistió ayer en otro comunicado.

No obstante, organizaciones civiles sostuvieron que se trató de una agresión más del crimen organizado en la zona.

"Mas de 300 migrantes fueron atacados por el crimen organizado luego de que estos se negaron a ser extorsionados. Machetazos, ráfagas de proyectiles y empujones que los aventaban al vacío son las formas en que fueron atacados y que el Gobierno de Veracruz negó expresando públicamente y sin investigación judicial que se trató de una "riña entre personas alcoholizadas", reprocharon.

Lev García y Henia Prado, Reforma, 3 de mayo.

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