Pide Relator regular el uso de la fuerza

Para proteger el derecho a la vida, el Gobierno mexicano debe retirar de las labores policiales a militares y crear una ley sobre el uso de la fuerza, sostuvo Christof Heyns, Relator Especial sobre Ejecuciones Extrajudiciales, Sumarias o Arbitrarias de las Naciones Unidas.

El funcionario de la ONU indicó que, de acuerdo con datos oficiales, en la Administración de Felipe Calderón ocurrieron 102 mil 696 asesinatos, de los cuales 70 mil tuvieron relación con el tema de drogas.

"Para prevenir la pérdida ilegal de la vida, la primera necesidad que destaco es alejarse del paradigma militar en el resguardo del orden; en segundo lugar, establecer un marco legal para el uso de la fuerza por parte de la policía. Debemos reforzar el papel de la policía y también los mecanismos que pueden utilizar las fuerzas de policía para garantizar que enfrenten el delito de manera debida", enfatizó Heyns en conferencia de prensa al concluir su visita a México para documentar este tipo de casos.

En las observaciones preliminares que serán presentadas en la sede del organismo internacional en Ginebra, Suiza, el funcionario indicó que los soldados en labores policíacas son incapaces de apartarse del panorama militar.

"Aplicar un enfoque militar a la seguridad pública propicia una situación en la que la población civil es vulnerable a una amplia variedad de abusos para los cuales no existe una rendición de cuentas suficiente en el sistema de justicia militar", subrayó.

Por tanto, expuso el funcionario de la ONU, la estrategia para evitar la repetición de estos casos debe garantizar que los militares dejen de ser juzgados en instancias castrenses y formularse una ley general del uso de la fuerza.

Heyns dijo estar preocupado por la creación de la Gendarmería Nacional, pues aunque el proyecto del actual Gobierno contempla un líder civil, se utilizarán 40 mil elementos entrenados militarmente.

"No debe escatimarse ningún esfuerzo desde el primer momento para garantizar que, como órgano encargado de hacer valer la ley, la Gendarmería se ajuste a un marco de derechos humanos incluyendo la capacitación adecuada y especializada sobre el uso de la fuerza en el contexto de la aplicación de la ley, en lugar de centrarse en los principios militares, y que se sometan a un sistema de rendición de cuentas de carácter civil".

El Relator insistió que el Estado necesita reconocer esta crisis de gran magnitud y dar como primer paso, solución a los casos heredados.

"Es muy fácil decir que todo va bien, que la violencia va en descenso, ¡no!, primero hay que ver de cara el problema y luego ir elaborando soluciones, creo que algunas de las reformas que se han dado, por ejemplo la reforma constitucional son importantes, y se tienen que fortalecer, pero va a ser un proceso largo", concluyó Heyns.

 
 
 
 
ASÍ LO DIJO

"El objetivo principal de todo Ejército es someter al enemigo mediante el uso de una fuerza superior. Mientras que el enfoque de derechos humanos, bajo el cual se deben examinar todas las operaciones para hacer valer la ley, se centra en la prevención, la detención, la investigación y el enjuiciamiento, con la fuerza sólo como último recurso".

Christof Heyns, Relator Especial sobre Ejecuciones Extrajudiciales, Sumarias o Arbitrarias de las Naciones Unidas


Henia Prado, Reforma, 3 de mayo.

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